una estrategia de relaciones públicas efectiva que comunique lo que se está haciendo, cómo y por qué, y contribuyan así, a una mejor comprensión y concientización más amplia
14/03/2024
Columnistas, Hoy en mercadotecnia
Manuel Alonso
En el clima corporativo actual, el impacto social es un concepto prioritario que innumerables organizaciones están abordando para comprender e implementar, incluso, están trabajando para incorporar mecanismos de impacto social en sus equipos, procesos y valores.
Sin embargo, para que esto suceda, la cadena debe incluir una estrategia de relaciones públicas efectiva que comunique lo que se está haciendo, cómo y por qué, y contribuyan así, a una mejor comprensión y concientización más amplia, que motive a generar más esfuerzos de impacto social.
Una de las herramientas que utilizan las corporaciones para crear impacto social es un plan de sostenibilidad corporativa. Este se refiere al diseño consciente de operaciones corporativas e ideologías para tener en cuenta la forma en que la entidad impacta, tanto positiva como negativamente, una serie de esferas tanto dentro como fuera del negocio. Estas esferas incluyen el medio ambiente, los públicos
internos y externos, la estabilidad económica, los problemas sociales y la comunidad.
El impacto social no necesita ser etiquetado como “sostenibilidad corporativa” para que sea efectivo y neurálgico. Sin embargo, los recursos y el lenguaje para los programas de sostenibilidad proporcionan
un punto de partida útil para las entidades que desean incorporar el impacto social en la forma en que
hacen negocios.
En múltiples industrias se han implementado programas de sostenibilidad corporativa exitosos y duraderos. Varias entidades están movilizando su fuerza laboral, su influencia y sus activos para lograr
un positivo bien social, económico, ambiental y/o comunitario. Sin embargo, cuando alguna parte vital
del proceso se descuida, será difícil que todo el potencial de esos mecanismos y acciones se concrete.
Aquí es donde entran las relaciones públicas.
Para que el impacto social sea efectivo, depende en gran medida de aprovechar la influencia de la
organización y sus mejores prácticas. Las corporaciones que comparten los resultados de sus iniciativas
de impacto social inspiran y motivan a otras empresas a crear sus propios cuadros de impacto social. Si
no se le diera difusión a estas iniciativas e historias, sería mucho más difícil generar un impulso y una
acción generalizada detrás del compromiso del impacto social.
El conocer como organizaciones toman iniciativas hacia la sostenibilidad corporativa, generan una
motivación significativa para que otras entidades den el paso hacia los programas de sostenibilidad, lo
que se mitigará si aquellas que llegaron primero no hubieran empleado las relaciones públicas para
hacerlo visible. Las estrategias de relaciones públicas efectivas comparten las mejores prácticas, que son
útiles para que otras entidades, no solo se contagien, sino que ahorren tiempo y esfuerzo.
Valerse de las relaciones públicas y sus herramientas para compartir historias de manera efectiva, es
una parte vital de cualquier campaña de impacto social. Si se está considerando implementar un
programa de sostenibilidad corporativa en su empresa, es importante reconocer el valor que las
relaciones públicas agregan al proceso de impacto social y asegurarse de que se asignen recursos para
lograrlo.
En resumen, las relaciones públicas son esenciales para comunicar el impacto social de una empresa
porque contribuyen a construir y mantener una reputación positiva, fomentan la transparencia y la
credibilidad, generan interés y compromiso, diferencian a la empresa en el mercado, ayudan en la
gestión de crisis y, contagian a otras organizaciones a hacerlo.