Un caso de motivación
Un ejemplo de motivación es el caso de Michael Jordan, considerado uno de los mejores jugadores de baloncesto de todos los tiempos. A pesar de que no fue seleccionado en el equipo de baloncesto de su escuela secundaria, Jordan siguió trabajando duro y practicando incansablemente. Su constante dedicación y determinación lo llevaron a ser elegido para el equipo universitario de la Universidad de Carolina del Norte y posteriormente a una carrera increíblemente exitosa en la NBA. Su perseverancia y pasión por el juego lo impulsaron a superar obstáculos y a alcanzar sus objetivos, convirtiéndose en un verdadero ejemplo de motivación para muchos.
